El Martillo del Emperador

"Vais a morir.

Yo no sé cuándo. No sé la hora, ni el lugar.


Pero vais a morir.


Lo único que da valor a vuestra vida es el valor de vuestra muerte. Es lo más valioso que tenéis. Junto a vuestra fe, y vuestra determinación. Ellas serán vuestra armadura.


Los hombres menores, sus actos, victorias y derrotas, se miden por el valor de su vida.


A vosotros, niños, se os medirá por vuestra muerte.


Sangraréis. Sentiréis dolor. Y muchos sufriréis tanto por los implantes que habéis recibido que apretaréis el gatillo del bólter que os daré hoy para aliviar vuestro dolor.


No vais a vivir todos para ver el final de vuestro entrenamiento. No llegaréis todos a desarrollar los nuevos órganos que crecen en vuestro interior.


La semilla del Primarca no es para hombres menores. Algunos de vosotros, desgraciadamente, lo sois. Y lo seréis.


Algunos estallaréis gritando maldiciones cuando los implantes desgarren vuestra carne.


Otros moriréis en el entrenamiento, torpes y lentos, incapaces de esquivar a tiempo, de saltar más lejos o de correr más rápido. Es un regalo: el xenos no os otorgaría una muerte rápida.


A otros os mataré yo, porque la semilla del Primarca ha de crecer libre de la mala hierba.


Moriréis como hombres menores, y vuestro nombre no será recordado, porque no habréis sido nada en la historia de este Capítulo. Se os juzgará indignos de portar el Sagrado Emblema, y el juicio será severo.


Pero algunos viviréis. Grandes. Enormes.


Poderosos.


Más rápidos. Más fuertes. Mejores. Tendréis la talla de leyendas, porque habréis sido los Escogidos de toda la humanidad.


Y os prometo hoy que jamás volveréis a temer a la muerte.


Porque ya no podréis morir como hombres. Nunca. Nunca más.


Y ese día, ese día, vuestra muerte, vuestra Sagrada Muerte, será el más digno regalo que podáis hacerle al Santo Emperador.


Ese día seréis incluidos en la gloriosa historia de nuestro Capítulo.


El Capítulo Hello Kitty."






Texto: Max Verdié. Imagen vista en www.cargad.com

Depósito al 6% TAE

Estimados Amiguitos del Hobby Games Workshop y sus formidables juegos de Simulación Estratégica de Conflictos Bélicos:

He aquí unas pocas imágenes del depósito de combustible que hemos creado entre Mr Plástico y yo, La Masilla.

Es simplemente una tarrina de CDs (de cederrones). Mr Plástico se dio cuenta de que unas cuantas pajas nunca vienen mal, y clavó cuatro de ellas, bien dobladas, violentamente en los costados. La escalerilla son clips doblados, la trampilla superior es una cosa redonda de plástico que nadie se atrevió a identificar y el bulbo al lado de ésta, un pequeño led.

Para mi gusto, se ve demasiado a primera vista que es una tarrina de cederrones, pero es un ilustrativo ejemplo de que la realidad está esperando ser modelada. Además, está claro que tiene el aspecto de un desgastado depósito con cuatro buenas pajas. Un buen detalle de todo esto que sigue siendo funcional para meter dentro CDs. Fácil, simple, y para toda la familia.

El efecto del óxido se ha conseguido empleando punteados. Se imprimó todo con pintura plateada en spray, para dar después una capa basta y diluida de pintura marrón oscura, muy intensa, de industrias Titán, línea de acrílicos para manualidades.

Tras esa capa, punteé con un pincel del 12 de pelo de buey para pincel seco, con otros tres tonos: marrón algo menos oscuro, marrón naranja y pintura naranja medio, de diversas marcas: Andrea, Vallejo y Citadel Foundation, respectivamente.

Las cañerías de paja recibieron una aguada de tinta verde citadel sin diluir. Esto dejó al metal de la imprimación con un aspecto sucio, base que trabajé con punteados de diversos tonos de verdes manchados y marrones verdosos, sin gradación, para crear el efecto de desgaste. Una veladura de ocre con un puntito morado aglutina el conjunto y le da un aspecto polvoriento. Algo muy similar a todo esto se aplicó al led, junto a la escotilla.

La parte que más me gusta del modelo es la escalera con la barra de seguridad roja y amarilla desgastada. La barra se pintó realizando primero un rectángulo blanco, que pinté entero de escarlata. Sobre esto, coloqué las líneas amarillas, de forma basta e irregular. Para crear el efecto de desgaste, volví a puntear con los mismos tonos de óxido. La escalera, simplemente, recibió un pincel seco basto de escarlata y amarillo.

Los restos de líquido que salen de las pajas se pintaron con varias capas muy líquidas. Tinta verde, y sobre esta, sin secar del todo, tinta azul. Tras esto, una veladura con azul y una segunda, algo descentrada, con ese mismo azul mezclado con gris al 50-50. Añadimos algo de blanco para la capa final.

Y ya, para acabar, la base del modelo se pintó de negro, con un punteado del primer marrón intenso y un verde sucio. Estos dos tonos lo preparan para el césped electrostático, que quedará mucho más natural gracias a la mezcla de colores.

Hemos pensado Mr. Plástico y yo que unos números de serie y alguna pintura de seguridad más no le vendrían mal.

Y unos impactos de bala.

En plan canalla.